En el artículo de hoy, vamos a hablar sobre las diversas opciones de asesoramiento que tienen los jubilados y pensionados, tanto en organismos públicos como privados, cuando necesitan defender sus derechos. Este contenido resulta de gran importancia para todos aquellos que tienen una pensión o están en tramites para tener una, todo lo que necesitas saber lo vas a encontrar acá.
Contenido del post
¿Cómo defender tus derechos como jubilado?
Una de las dudas más frecuentes que tienen los jubilados, o las personas que planean jubilarse, es cómo defender sus derechos. A menudo, se encuentran situaciones en las que las personas han sufrido suspensiones en sus beneficios durante meses, sin saber a dónde acudir. Por eso, se debe explicsar antes que todo las diferentes opciones de asesoramiento y para qué sirve cada una.
Diferenciación entre problemas y su gravedad
Antes de profundizar en las opciones de asesoramiento, es importante hacer una diferenciación entre los problemas que podemos enfrentar en nuestra vida cotidiana, según su gravedad. Esto nos ayudará a determinar si necesitamos simplemente un acompañamiento o un asesoramiento básico, o si estamos frente a una violación de nuestros derechos o una situación grave que impide acceder a algún beneficio.
Cada situación tiene un nivel de molestia diferente y debemos evaluar si estaríamos dispuestos a iniciar un juicio por ello. Si la respuesta es negativa, entonces debemos buscar una solución que no sea tan costosa, tanto en términos de dinero como de tiempo y esfuerzo.
Organismos de asesoramiento público
El primer organismo que mencionaremos es la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), el organismo por excelencia destinado a la seguridad social. En ANSES podemos encontrar un asesoramiento básico sobre los beneficios que nos corresponden según la legislación vigente. También podemos realizar trámites de subsidios, pero no encontraremos asesoramiento más especializado, como por ejemplo, estrategias para mejorar nuestro haber jubilatorio o cómo reajustar nuestra jubilación, pensión o retiro por invalidez.
Es importante destacar que los empleados de ANSES que nos asesoran no son abogados, por lo tanto, no nos brindarán asesoramiento jurídico y solo se basarán en las normativas internas del organismo. Si una normativa de ANSES es inconstitucional o se opone a otra ley, ellos no nos lo dirán, ya que están limitados por las normativas internas del organismo.
Defensoría del Pueblo
Otro organismo importante es la Defensoría del Pueblo, presente tanto a nivel nacional como local, en cada provincia. Este organismo público se encarga de la defensa de los derechos humanos en diversos ámbitos, incluyendo temas previsionales, defensa al consumidor, entre otros. Las defensorías del pueblo locales realizan asesoramiento a las personas y pueden ayudar en la redacción de reclamos o notas. Aunque no es común, también pueden representar a personas en casos específicos, como amparos colectivos.
Situaciones más graves
Cuando nos encontramos ante situaciones más graves, es necesario contar con un asesoramiento más especializado y profundo, como el cálculo de nuestra jubilación o si nuestros derechos están siendo violados. En estos casos, necesitamos defender nuestros derechos y articular las acciones necesarias. Aquí tenemos dos opciones: acceder a organismos de defensa jurídica gratuita o contratar un abogado particular.
Los organismos de defensa jurídica gratuita están habilitados por el Estado y requieren que demostremos que estamos en una situación de vulnerabilidad o pobreza que nos impide contratar un abogado particular. No podríamos acceder a estos organismos para iniciar acciones patrimoniales, como reclamar el reajuste de nuestra jubilación.
Organismos de defensa jurídica gratuita
El primer organismo de defensa jurídica gratuita es el Defensor Oficial, el cual puede ser a nivel federal o local, dependiendo del ámbito judicial en el que necesitemos defendernos. El Defensor Oficial Federal actuará ante la justicia federal en casos contra organismos nacionales como ANSES o PAMI. El Defensor Oficial local o provincial, por otro lado, nos defenderá en juicios contra privados o organismos previsionales locales.
Estos defensores oficiales dependen del Ministerio Público de la Defensa y actúan en los tribunales correspondientes a cada zona. Es importante mencionar que los defensores oficiales no son lo mismo que las defensorías del pueblo, ya que son organismos totalmente distintos.
Opciones de asesoramiento jurídico gratuito
Otras opciones de asesoramiento jurídico gratuito son los consultorios jurídicos de universidades y colegios de abogados. La Universidad de Buenos Aires, por ejemplo, cuenta con un Consultorio Jurídico Gratuito en varias sedes, en el cual un grupo de alumnos supervisados por un profesor de la UBA, y también abogado, representan a las personas. Muchas universidades y colegios de abogados ofrecen este tipo de servicios.
Por otro lado, algunos colegios de abogados cuentan con consultorios jurídicos gratuitos donde trabajan abogados, la mayoría de las veces de manera voluntaria, para defender a personas de bajos recursos. En algunos casos donde no se cuenta con un consultorio jurídico gratuito, el colegio de abogados podría sortear un abogado de oficio. Sin embargo, esta opción no es la más recomendable, ya que no garantiza que el abogado asignado sea especialista en el área que necesitamos.
Abogado particular
Finalmente, la opción de contratar un abogado particular siempre está disponible. En este caso, se deben pagar los honorarios conforme a las leyes de honorarios de cada jurisdicción. Contratar un abogado particular nos brinda un asesoramiento más completo y especializado, sin embargo, implica un costo económico que no todos pueden permitirse.
Conclusión
En resumen, es importante evaluar la gravedad de nuestro problema para determinar qué tipo de asesoramiento necesitamos. Si es algo simple, como presentar una nota, podemos obtener asesoramiento en ANSES o en la Defensoría del Pueblo. Pero si se trata de algo más grave o que involucra nuestros derechos, es fundamental contar con un asesoramiento especializado. Para ello, podemos acceder a organismos de defensa jurídica gratuita o contratar un abogado particular.